La ejecución efectiva de la estrategia empresarial es, quizá, uno de los mayores desafíos que muchas organizaciones enfrentan en la actualidad. Los resultados obtenidos en innumerables estudios al respecto demuestran que la gran mayoría de las personas que trabajan en empresas y organizaciones no comprenden cabalmente la estrategia de estas y carecen de claridad sobre cómo su trabajo contribuye a su cumplimiento.
Además de los factores comentados en artículos anteriores (leer el artículo “¿Cómo ser más efectivos en la ejecución de tu estrategia de negocios?”) que explican lo señalado, existen otros factores que pueden contribuir a mejorar la ejecución estratégica en las organizaciones.
Los siguientes aspectos complementan la idea de establecer una conexión efectiva entre la estrategia y la realidad operativa del negocio:
1. Liderazgo comprometido: quienes tienen posiciones de liderazgo en la empresa tienen una responsabilidad y un papel fundamental en la efectividad de la ejecución estratégica. No sólo resulta necesario que demuestren en los hechos un compromiso claro con la estrategia que se ha definido, sino también respecto a cómo la bajan en su comunicación hacia sus respectivos equipos. La coherencia entre el decir y el actuar de cada uno de los líderes, puede resultar en un catalizador o en un depredador de la estrategia. Recordemos el dicho “las acciones hablan más fuerte que las palabras”. A esto se agrega, naturalmente el fomentar con sus actos una cultura de responsabilidad y rendición de cuentas (“accountability”) en la empresa.
2. Comunicación bidireccional: La comunicación no debe ser unidireccional, donde los líderes simplemente transmiten la estrategia a los empleados. Es esencial fomentar la comunicación bidireccional, que permita a los empleados expresar sus ideas, hacer preguntas y brindar retroalimentación sobre la estrategia. Esto promueve un mayor sentido de pertenencia y compromiso por parte de los colaboradores.
3. Desarrollo de capacidades: La ejecución estratégica exitosa requiere que todos los equipos de trabajo puedan adquirir y ejercitar las habilidades y competencias necesarias para llevar a cabo sus tareas y con ello contribuir al logro de los objetivos estratégicos. Las iniciativas de capacitación y formación que se lleven a efecto no deben descuidar la importancia de estar muy alineadas con la estrategia.
4. Gestión del cambio: La ejecución estratégica a menudo implica cambios significativos en la organización, ya sea en los procesos, la estructura o la cultura. Al momento de querer ejecutar con eficacia la estrategia, la gestión del cambio toma un papel preponderante, al permitir anticipar las resistencias y brindar el apoyo necesario a los colaboradores durante el proceso de implementación de la estrategia. Una gestión efectiva del cambio garantiza una transición más suave, una mejor comprensión y, por consiguiente, una mayor aceptación de la estrategia.
5. Seguimiento y ajuste continuo: La ejecución estratégica no es un proceso estático, sino dinámico. Ello requiere establecer mecanismos de seguimiento y evaluación periódicos para medir el progreso hacia los objetivos estratégicos y realizar los ajustes necesarios en función de los resultados obtenidos y las condiciones cambiantes del entorno empresarial. Esto permite una adaptación ágil y garantiza que la estrategia permanezca relevante y efectiva a lo largo del tiempo.
La ejecución estratégica exitosa no es un evento único, sino un esfuerzo continuo que requiere adaptación y enfoque constante. Veamos como se pueden superar los desafíos y alcanzar el éxito continuo en la ejecución estratégica.
Resistencia al Cambio: Uno de los desafíos más comunes en la ejecución estratégica es la resistencia al cambio. Los cambios en la estrategia pueden encontrar oposición tanto a nivel individual como organizacional. Para superar este desafío, es fundamental comunicar claramente la necesidad de cambio, los beneficios que traerá – para la empresa y para cada uno(a)- y cómo se alinea con el logro de los objetivos estratégicos. Involucrar a los colaboradores en el proceso, brindarles capacitación y apoyo, y reconocer y recompensar los logros pueden ayudar a superar la resistencia y fomentar una mentalidad de cambio positiva.
Falta de Flexibilidad: A veces, los planes estratégicos pueden encontrarse con obstáculos inesperados o situaciones cambiantes en el entorno de los negocios. La falta de flexibilidad puede dificultar la ejecución efectiva de la estrategia. Para superar este desafío, es importante fomentar una mentalidad ágil y adaptable en toda la organización y disponer de herramientas que ayuden a esa rápida adaptación. Esto implica estar dispuesto a ajustar los planes y las tácticas según sea necesario, aprovechar las oportunidades emergentes y aprender de los errores pasados. La capacidad de adaptación es esencial para mantenerse en el rumbo hacia los objetivos estratégicos, especialmente en entornos turbulentos como los que vivimos en el presente.
Falta de Coordinación y Colaboración: La ejecución estratégica exitosa requiere una coordinación y colaboración efectivas entre diferentes equipos y departamentos. La falta de alineación puede conducir a la duplicación de esfuerzos, la falta de sinergia y la disminución de la efectividad general. Para superar este desafío, es fundamental establecer canales de comunicación claros y promover la colaboración transversal. Fomentar la creación de equipos multidisciplinarios, establecer reuniones regulares de seguimiento y alentar la participación activa de todos los involucrados pueden mejorar la coordinación y garantizar que todos estén trabajando juntos hacia los mismos objetivos.
Falta de Enfoque y Priorización: La falta de enfoque y priorización puede dispersar los recursos y debilitar la ejecución estratégica. Resulta crítico e indispensable establecer prioridades claras, inequívocas y asignar los recursos (tiempo, equipos, dinero) de acuerdo a esas prioridades. Esto implica identificar las actividades y proyectos que tienen el mayor impacto en la consecución de los objetivos estratégicos y enfocar los esfuerzos en ellos. El diseño que se haya hecho de la estrategia, si está bien estructurado, puede contribuir significativamente a facilitar la asignación de recursos, generalmente escasos y requeridos por múltiples iniciativas en paralelo. Además, es fundamental establecer mecanismos de seguimiento y evaluación regulares para asegurarse de que se están logrando los resultados deseados y ajustar la dirección según sea necesario.
En síntesis, superar los desafíos en la ejecución estratégica es esencial para lograr el éxito continuo en el mundo empresarial dinámico de hoy en día. Al abordar la resistencia al cambio, fomentar la flexibilidad, promover la coordinación y colaboración, y mantener un enfoque claro y prioritario, las organizaciones pueden enfrentar los desafíos con confianza y alcanzar resultados significativos. Recuerda que la ejecución estratégica efectiva requiere un compromiso continuo y una mentalidad de mejora constante. Con un enfoque estratégico y una resiliencia adecuada, tu organización estará preparada para destacar en la capacidad de implementación de su estrategia.
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